El royalty consta de un tipo de compensación económica que se efectúa a partir de utilizar un producto sujeto a derechos de autor, propiedad industrial o propiedad intelectual.
Concretamente, royalty se refiere a un precio que una persona o empresa debe abonar a cambio de utilizar un invento que pertenece a alguien. Hoy en día, debido a los avances tecnológicos, resulta muy importante para simplificar tareas, mejorar procedimientos y hasta lograr experiencias más positivas, entre otras.
Tipos de royalty
Por lo descrito, los royaltys son muy necesarios y frecuentes en todos los rubros y actividades. Existen al menos tres tipos:
- Fijación de un importe: es el más habitual en diferentes mercados, aunque principalmente en el de la moda y textil. Dura un lapso de tiempo determinado
- Regalías establecidas por porcentaje: aplica para las compras y ventas. Es un tipo variable que depende pura y exclusivamente de las operaciones que se efectúen. Predomina en el rubro tecnológico y de telecomunicaciones
- Mixtos o intermedios: se denominan así ya que se adecúan a las distintas naturalezas; es decir, según el sector, los derechos de propiedad cambiarán debido a la variación en las patentes de las maquinarias agrícolas
¿Cuál de los tres tipos es mejor? Ninguno en particular, dado que depende principalmente de los productos o servicios, cómo las personas los aprovechen y, claro está, la empresa que los utilice; no es igual una grande en constante actividad que una Pyme más limitada.
Recursos naturales y energías, los sectores que más royaltys utilizan
Tal como te comentamos antes, el royalty ha llegado a muchos países y a la gran mayoría de las actividades. Sin embargo, los que emplean (o requieren de) recursos naturales y energías (por ejemplo, renovables) son los que le proporcionan un mayor protagonismo.
Además, muchas de las empresas que trabajan con estos recursos son públicas. En estos casos, la administración pública interviene y fija un sistema de tributos por el uso y aprovechamiento de dichos bienes para la sociedad.
Se trata además de un sector en constante crecimiento como consecuencia de la importancia de utilizar y aprovechar al máximo los recursos naturales para diversos beneficios: menor contaminación, costos más bajos, generar puestos de empleo, etc.
El sector industrial, también de gran relevancia
En un contexto en el que los procedimientos de gestión, fabricación, recursos humanos y marketing evolucionan, las empresas (sobre todo las más grandes) encuentran en el royalty una oportunidad de progreso. ¿Por qué? Porque les permite conservar sus fórmulas en secreto, y los productos que se usan reúnen todas las condiciones necesarias.
Cabe destacar que, aunque el producto o elemento no sea propio, no queda ninguna patente; es decir, tus fórmulas podrán llevarse adelante y repetirse sin que ello devenga en que luego los dueños accedan y puedan copiarlas.
Al mismo tiempo, muchas de estas fórmulas y secretos están imposibilitados de desarrollarse en productos propios, lo que obliga a aprovechar el royalty para obtener el éxito anhelado.
Aunque a veces pasa inadvertido, el royalty implica una gran opción e inversión para las empresas en sus tareas cotidianas. Si lo que debes abonar resulta menor que lo que ganarás en el mediano y largo, entonces debes tenerlo en cuenta e incorporarlo.
